lunes, 14 de marzo de 2016

Lola Roca XCIV

Lola Roca Gaviota

Quiero presentaros a Lola Roca Gaviota, Lola Roca Gaviota está muerta.
La foto es en la playa de la Malagueta, un día primaveral casi veraniego de estos que el clima en Málaga regala, la playa estaba llena de gente en bikini y bañador, tomando el sol, comiendo, tranquilamente, disfrutando de estos lunes al sol tan andaluces.
La foto es de hoy, 14 de marzo del 2016 sobre las 14’00 horas, lo sé porque le estuve haciendo fotos a Lola después de llamar por teléfono:
Captura de pantalla de mi teléfono.

Como hacía muy buen día, Tina (mi perra de 4 años) y yo nos hemos ido a pasear por la Malagueta porque a las dos nos gusta mucho esa playa aunque siempre esté llena de mierda, porque como no somos de aquí no nos da asco y es la playa más cercana desde casa, para ir las dos andando.
Nada más llegar a la arena, (me estaba terminando de descalzar), una mujer muy educadamente se me ha acercado preguntándome si hablaba inglés, oh my god! pues tengo el That’s English muy oxidado, pero tenía cara de necesitar comunicarse, así que nos hemos entendido a la perfección, porque el lenguaje del alma es universal.
Llevaban, ella y su marido, un rato cuidando de Lola Roca Gaviota, que la pobre estaba con un ala más pa’llá que pa’acá, nadie les ayudaba, no sabían qué hacer y al vernos a Tina y a mí ha venido directa. Su marido estaba a unos cien metros dándole sombra a Lola Roca Gaviota.
¿Y qué hacemos? Pues pedir ayuda…así que primero he llamado al 112, donde la respuesta ha sido que quien se encarga de recogida de animales es la policía local, el 112 no.
Bien, pues he llamado a la policía local y la policía local de Málaga nos ha dicho ¿¿¿una gaviota??? No es su competencia, eso tiene que ser el centro zoosanitario, le he pedido el teléfono. El centro zoosanitario no nos cogía el teléfono, mal augurio, a la segunda llamada han escuchado la situación y nos han dicho que no se hacen cargo de recoger aves a no ser que estén en peligro de extinción. Ante nuestra desesperación, insistencia y frustración (iba traduciendo todas las llamadas a mi básico inglés) nos ha dado otro teléfono, esta vez un 900 de competencia municipal. Allí han escuchado nuestro peregrinaje telefónico y  nos han confirmado lo que ya sabíamos, no es competencia de ningún organismo público recoger a una gaviota moribunda de la playa.
Tina escarbaba un hoyo inmenso tirándonos la arena en los pies y nosotras no sabíamos que más hacer…he guardado el teléfono, con mucha pena hemos ido hacia Lola Roca Gaviota y el marido de, ya, mi compañera del alma. El matrimonio es vegano y estas cosas en Berlín así no pasan, Spain is different, olé olé, espero que lo cuenten a todxs sus contactos.
Lola Roca Gaviota era una hermosa gaviota, me han dicho que tenía un ala rota y que le habían estado dando agua, pero que se estaba apagando por momentos era algo obvio. Eran casi las 14’30 cuando Tina y yo nos hemos ido, hemos decidido no mover a Lola Roca Gaviota, dejarla morir ahí, porque no conocíamos centros veterinarios de urgencias cerca de la Malagueta y tampoco ya estábamos segurxs de que fueran a socorrerla o si quiera querer atenderla. Ellxs se iban a quedar a acompañarla, Tina y yo nos hemos tenido que ir porque trabajo de tarde.
La playa estaba llena de gente, algunas personas nos miraban, unas con curiosidad, otras con indiferencia, nadie ha venido a ofrecer ayuda. La indiferencia ante Lola Roca Gaviota era total, había gente masticando un bocadillo (probablemente de otro animal muerto) mirando como Lola Roca Gaviota se iba muriendo lentamente.
Mi compañera del alma ha dicho algo que me ha llegado al corazón: que eramos lxs únicxs normales de toda la playa. Y tenía toda la razón, no es normal que la muerte en vivo y en directo de un ser vivo te dé igual, no es normal que no haya organismos públicos competentes para estos casos, no es normal que nadie haga nada, normal no es.
Lola Roca Gaviota era un pájaro, todos los seres vivos nacemos para morir y ella ha tenido que morir por inanición social.
 Pero lo realmente triste de esta historia es que, probablemente muchas de las personas que estaban hoy en la playa y que no han hecho nada por Lola Roca Gaviota han firmado el change.org para salvar el Amazonas o el Ártico o para proteger el hábitat del oso pardo o del lince ibérico o del águila real, e incluso habría alguna socia de Greenpeace…pero Lola estaba ahí al alcance de su mano y no les ha importado nada.  
El inmovilismo, la indiferencia hacia el dolor ajeno, la falta de empatía, la negación de auxilio, la falta de cobertura pública, la ausencia de ética social y de solidaridad…eso sí que no es normal.

Lola Roca Gaviota al irme.
Volviendo a casa, me preguntaba qué tipo de prioridades nos rigen…yo me he ido para no llegar tarde a fichar en un trabajo con unas condiciones paupérrimas en cuanto a reconocimiento, precariedad y remuneración...Lola ya habrá muerto, pero nos he prometido que escribiría y difundiría su historia, así que, gracias por leer y compartir. Hasta siempre Lola Roca Gaviota.

sábado, 5 de marzo de 2016

Lola Roca XCIII

Lola Roca no se ríe de chistes machistas, ni racistas, ni si quiera de los chistes de bolleras y maricones… ¿de qué se reirá esta tía?
No le hacen gracia los chistes verdes, ni los comentarios sexistas hacia niñas que acaban de estrenar su primer sujetador ¿qué coño le hará gracia a Lola Roca?
A Lola Roca, además, es muy difícil tenerla contenta a la hora de comer porque es que no come de nada. Ya era rarita pero de un tiempo para acá es que está imposible, que si esto lleva huevo, que si los bebés cerditos se traumatizan al ser destetados, que si las vacas lecheras sufren esquizofrenia, que si el calcio de las gallinas ponedoras…con lo rico que está el jamón, ¡qué petarda!
Lola Roca es que ya ni sale, bueno me dijeron que la vieron la otra noche en ese antro donde trabajaba antes tomándose una sin. Eso me han dicho, pero para tomarse una sin, mejor que ni salga, la verdad.
Lola Roca ahora madruga todos los días aunque trabaje de tarde.
Le ha dado por estudiar una cosa de esas raras que es medio secta, no tengo ni idea de lo que es, pero no me da buena espina. Algo de yoga pero que hacen cosas muy extrañas, en plan “ommm”, que si meditación y tal, ya te digo que no sé lo que estudia pero algo así muy raro, que no sé que es, pero no me gusta.
No va conmigo, ¿te vas a terminar ese chorizo? pídeme otra copita y dame un cigarro, anda.
Lola Roca siempre ha sido muy de causas perdidas en plan ayudar a las palomas y decir que las ratas eran monas, pero vaya…es que está…

Lola Roca está más ubicada que nunca y sigue riéndose mucho, aunque su sentido del humor sea…”otro”.
Pokhara,Nepal, junio 2012.
Nota de la autora.-tengo el blog muy aburrido, lo sé, pido perdón. Estoy escribiendo de manera remunerada para una empresa, entonces Don Dinero me tiene coartada las Lolas, pero volveremos a la carga. Gracias por preguntarme y animarme a que siga con este blog por amor al arte y a todas mis Lolas. Amor y letras!