martes, 26 de noviembre de 2013

Lola Roca XVII



Lola Roca doblaba bien la servilleta y cruzaba por los pasos de cebra ya desde pequeña. Ella solía hacer siempre lo correcto, por eso, la primera vez le pilló tan de sorpresa ese sopapo. El resto veces siguientes llegó incluso a barruntárselos.
Lola Roca en su cuerpo tiene cicatrices tan espeluznantes que no sería capaz de desnudarse jamás delante de otro hombre que no llevase bata blanca.
A Lola Roca la han dejado ya marcada a fuego, a puñetazo,  a tirón de pelo, a insultos, a camisetas de tirantes rotas y a humillación.
Lola Roca estuvo todo el tiempo que pudo negándose el echar a andar y dejarle atrás. Pero lo hizo, proclamó un “se acabó” a los cuatro vientos.
Tras puntos de encuentro, sesiones de psicóloga, órdenes de alejamiento, olor a uniforme, cuartelillos, coches patrulla…Hoy Lola Roca descansa en paz.

A la memoria de la asesinada en Torrelaguna (sierra de Madrid) por violencia machista, en total repulsa hacia este y todos los crímenes del Femicidio patriarcal.

miércoles, 20 de noviembre de 2013

Lola Roca XVI



Lola Roca va a estrenar lavadora, una vez más, pero su colada es diferente.
Nada de programas cortos, esta vez va ir paso a paso, Lola Roca va a hacer todo el proceso, de prelavado a vaciado, va a permitirse no acelerar, va a permitirse realizar sus propios tiempos.
Lola Roca no quiere más prendas desteñidas en su colada.
Se dispone a poner una lavadora con blanco nuclear.
Su cabeza centrifuga porque, por fin, se reconoce que entre el detergente y el suavizante se secó su amor.
Todos los calcetines se volvieron desparejos a la hora de tender…mal augurio.
Lola Roca quiere controlar sus propias prendas, sin culpabilizarse, sin auto-reproches, eligiendo su programa.
El último empujón que recibió hizo finalizar su letargo. Con la última avería selló una relación de dependencia alienante y paranoica de la que sólo ha aprendido a separar prendas.
Ahora Lola Roca es consciente de que se quiere más a sí misma, con sus fases de centrifugado y prelavado, con todas sus etapas y versiones de enjabonado y aclarado.
Se quiere a ciclos de lavado completos, nadie más va a hacer que vuelva a saltarse las instrucciones de ningún electrodoméstico.


 http://www.youtube.com/watch?v=br1greLZ0qk

viernes, 8 de noviembre de 2013

Lola Roca XV



Hasta entonces lo de Ley de Dependencia le sonaba a algo relacionado con el plan Ibarretxe. 

Lola Roca andaba por la vida de puntillas hasta que se vio obligada a arrastrar un pie, sólo un pie, es lo que tienen las hemiplejias…que te dejan a la mitad incluso para caminar. 

Fue toda una toma de tierra para Lola Roca.

De ese fallo cardiovascular su cuerpo no se ha recuperado del todo. Lola Roca es tan consciente de que eso no va a pasar jamás, que a veces, le da la risa floja, y se mea, y a la vez, rompe a llorar.
Lola Roca asume suyo ese traspiés de pasos lánguidos y sudorosos, que la llevan de un extremo a otro del pasillo. 

Lola Roca acepta y, también, medita sobre otra de las cosas que te quita una hemiplejia: la posibilidad de vivir en un cuarto sin ascensor, eso sí, la hipoteca no te la divide entre dos, ni te adapta el portal. Pero Lola Roca se sabe con suerte, con resignación y gratitud aceptó el hogar maternal.

Volver a necesitar cuidados, ahora lo de la dependencia le encaja en su media cabeza, aún operativa. Lola Roca de humor negro bromea constantemente sobre mitades.

Lola Roca lo que es vestirse, se sigue vistiendo sola, tarda 43 minutos de calcetines a diadema los días que está más ágil. Las duchas son otro cantar.

Lola Roca se reconcome por dejar de ver barreras en  todas las juntas de las baldosas mal puestas. 

Lola Roca sale con tiempo de casa, arrastra el pie y esa obsesión por la puntualidad tan suya. Hoy tiene cosas que hacer  y no quiere que los escalones que pueda encontrarse en el camino la hagan llegar tarde.

lunes, 4 de noviembre de 2013

Lola Roca XIV



Lola Roca de pequeña siempre quiso ser actriz.
Ahora, Lola Roca está escribiendo su historia aunque ella no es la protagonista, se ha supeditado a ese él que no la valora y menosprecia.
Lola Roca ha cruzado muchas veces esa laguna pensando en él, hablando de él, soñándole a él y recibiendo sólo maltrato.
Aparece su personaje en escena y a Lola Roca se le olvida el guion,  se tira al suelo y a brazas recoge las migajas de atención, que ambos creen que le corresponden.
Después se odia, se regaña, se mortifica, se recrimina… pero no puede evitarlo. Estar frente a él significa que Lola Roca olvide completamente su atrezo  de dignidad.
Lola Roca  se desviste, se quedan a solas siempre, su vulnerabilidad, él y ella.
Eternamente personaje secundario en su escenario. 
Lola Roca se conforma con decir tres frases del guion…
Lola Roca es la otra, la sombra en el plano principal. 
De secundaria a veces pasa a extra, otras ni a figurante... pero hay tomas falsas que él se empeña en repetir queriéndola sujetar por la cintura.
Lola Roca después siempre llora lágrimas que forman parte de la trama argumental.
Lola Roca sabe que jamás irán del brazo por la alfombra roja pero le quiere y a veces, a migajas, le parece que él a ella también. Ese es el hilo que la ata, con lo que se deja justificar tanto segundo plano.


http://www.youtube.com/watch?v=JQkMSj2gfc8